Dos pruebas se han celebrado esta temporada en el Santander Tour y dos victorias hemos tenido de jugadoras madrileñas. Dos de dos. Cien por cien. La primera prueba celebrada en Golf Santander fue para Luna Sobrón, golfista nacida en las Islas Baleares pero federada por Madrid. Mientras que el segundo torneo, que acabó este sábado en La Peñaza fue para Patricia Sanz.

Estas dos victorias son sólo un reflejo del buen trabajo que se está haciendo en Madrid con el golf en general y el golf femenino en particular. Es cierto que hay muchos factores que influyen en un triunfo, pero lo que está claro es que nunca son fruto de una simple casualidad.

Además de las dos victorias, Sobrón y Patricia Sanz son las líderes ahora mismo del ranking general, ambas empatadas con 5.400 euros en ganancias. Una magnífica puesta en escena para el golf madrileño del circuito nacional femenino.

No obstante, si echamos la vista atrás, resulta que este buen hacer de las madrileñas en el Santander Tour no es únicamente flor de un día. Ni mucho menos. El circuito nacional cumple este año su segunda temporada y ya el año pasado hubo mucho color madrileño en la parte alta de las clasificaciones. Sin ir más lejos, la vitoria en la prueba final del circuito que se disputó en Madrid (Golf Santander) fue para Virginia Espejo.

Así las cosas, se puede decir que las madrileñas suman ya tres victorias consecutivas en el Santander Tour. Además del triunfo en la final de Virigina Espejo, hay que destacar el buen hacer de Marta Sanz, hermana de Patricia. La golfista del Race consiguió el año pasado dos segundos puestos y un tercero y terminó en la segunda posición en el orden de mérito. Sólo se le resiste la victoria, objetivo que confía en conseguir pronto esta temporada.

De este modo, el Santander Tour habla de momento con acento madrileño, una excelente noticia que sirve para incentivar aún más a las jóvenes golfistas madrileñas que están en pleno proceso de formación, con el deseo de convertirse algún día en profesionales.