Octava prueba del Circuito de Madrid de profesionales, y esta vez nos fuimos hasta el club toledano de Layos para ver cómo Antonio Hortal levantaba su primer trofeo de la temporada.

Con una gran vuelta de 67 golpes, Hortal se impuso por tan sólo uno de ventaja sobre Ismael Del Castillo, y dos golpes sobre un trío de terceros clasificados: Jose Carlos Zafra, Javier Herranz, y el ganador de la pasada semana en el CCVM, Jacobo Pastor.

Clasificación Layos

Antonio Hortal siempre es uno de los favoritos en este circuito, pues entre otras cosas es el defensor del título del ranking del año, tras lograr un gran año 2018 en el que acabó imponiéndose a Sebastián García Rodríguez en lo que fue un bonito duelo durante todo el pasado curso.

La victoria de ayer, según nos cuenta el propio Hortal, estuvo basada en un gran juego largo, ya que el putt no acompañó como debiera. “He jugado muy bien de tee a green, he embocado una en el hoyo 6 desde 107 metros, casi meto otra en el 10 y otra en el 18 con un gran hierro 8. Con el putt he estado muy mal, podría haber hecho perfectamente ocho o nueve bajo. Así que bastante contento con mi juego.”

Hortal está centrado en su vida como profesional y en jugar torneos, aparte del Circuito de Madrid, que lo va a jugar entero, podrá jugar los torneos profesionales que haya en España, como su próximo objetivo, el PGA de Ciudad Real.

Pero entrenar duro no es lo único que hace, pues también colabora con la Federación de Golf de Madrid en la formación de los nuevos talentos, aportándoles su experiencia y capacidad de trabajo para que se vayan formando:

“De lunes a jueves, trabajamos la preparación física con los niños, no sólo para que le peguen más fuerte a la bola, también para que las correcciones técnicas luego se apliquen más rápidamente y de forma más sencilla. También buscamos prevenir sus lesiones, y que cuando tengan 18 años, y estén con los equipos nacionales jugando torneos muy importantes, sean portentos físicos.”

Pero de las cosas que más le gustan a ‘Toño’ es cuando viaja con los equipos de Madrid como capitán, ya que es donde más puede aportar a los jóvenes en la faceta de empezar a comportarse como un profesional. “En esas semanas que viajo con los chicos, básicamente mi función es enseñarles a vivir en un torneo, desde ayudarles a activar por la mañana, estar pendiente de que coman bien, que estiren al terminar… Y en cuanto a golf, ayudarles a preparar una buena estrategia en el campo, resolverles cualquier cuestión técnica que puedan tener y entrenar con ellos lo que hayan fallado al terminar cada vuelta. En definitiva, lo que he vivido yo como profesional se lo intento transmitir y que vayan aprendiendo a ver lo que les espera si quieren vivir del golf.”